CAMPOS, ANDRÉS / ROMERO, CARMEN
Decía Unamuno que hay quien viaja por topofobia, para huir de cada lugar, no buscando aquel a que va, sino escapándose de aquel de donde parte. Esta no es una guía para topófobos. O no para grandes topófobos, esos que viajan huyendo de sus lugares de origen, cuanto más lejos, mejor. Es una guía para viajeros a los que no les gusta alejarse mucho de casa: doscientos kilómetros como máximo.
En ese radio de acción, medido desde la madrileña Puerta del Sol, se hallan todos los destinos de este volumen. Sin alejarnos mucho de Madrid, pues, viajaremos con esta guía a lugares harto conocidos El Escorial, Aranjuez, La Granja
, pero también a parajes recónditos, como el valle segoviano del río Pirón, donde se esconden diez preciosas iglesias románicas, o como la villa romana de Noheda, cerca de Cuenca, donde se ha descubierto el mayor mosaico figurativo del mundo.